Madres 9

 Madres 9

Entrar dentro de un cerebro vacío es desolador. Esa es nuestra misión. Humanos en el desguace. No les quitan la vida. No hay sangre. Es una lobotomía. El cerebro no sufre. El cuerpo vegeta. Están y no están. Si alguien contaba con ellos ahora no responden. Los sacan de en medio. Bastó una noche insomne. Una pregunta pensada sobre la razón de la existencia. Querer saber es la peor de las culpas. No se juzgan con derecho a defensa, se les defenestra. Si tenían amigos y familia los pierden. No saben cuál es su culpa. No saben qué eran. Entran a formar parte de engranajes diversos. Robots orgánicos.

Marcia estaba en riesgo. Tenían que intervenir. Sacarla de allí.

Para ello hubo la acción coordinada de distintas médiums que bloquearon a aquellas personas presentes en ese momento. No verían desde el consciente, ni registrarían en sus mentes. 

Lo hicieron en medio de mucha gente. Así se creaba confusión i no se advertía la pantalla mental de distracción.

¿Por qué interesaba? Ella y su reflejo eran la clave principal. En su caso se había replicado al cien por cien. Era una clonación. Una prueba que no se repitió. La otra se activó con precipitación. No habían acordado el momento. Los genes, se suponía, no serían determinantes. Estaba el contexto. Los imputs vitales distintos.

Si se encontraran y se sumaran a la causa sería posible frenar la involución a que estaban llevando a los seres humanos.

Laila tuvo éxito. La cogió amablemente de su brazo y la encaminó por tramos señalados por los guías. No hablaron. Sólo se miraron. Marcia no opuso resistencia. No pensó en nada. Se dejó conducir, yendo de un medio de transporte a otro. Todos muy concurridos. Sin llamar la atención. De hecho, nadie las vio.

Entraron por un callejón solitario introduciéndose a través de un aparente muro de piedras. A la vista no parecía tener abertura ninguna. Era una ilusión óptica pintada sobre un hueco por el que pasaron de lado, una tras otra.

Ya dentro, Marcia recuperó su estado mental y preguntó. Nadie respondió. Observó a su alrededor y sacó sus conclusiones. En su memoria no había información. Su antes no era otro que el despertar de ese día. Nada más.

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